Aunque en el planteamiento inicial (la igualdad entre hombres y mujeres) coincidimos, cometes en este post un par de errores de bulto.
El primero es asumir que las redes sociales son una muestra representativa de la sociedad, lo cual no es cierto, ya que supongamos que, en el ejemplo que has dado, tenemos 1000 energúmenos (esta cifra la he estimado de forma aleatoria, por lo que es absolutamente factible que sean muchos menos) entre unos 20 millones de varones españoles (no incluyo en estas cifras hispanoamericanos ni extranjeros que hablen español correctamente), lo cual nos da un porcentaje ínfimo.
El segundo error que cometes es analizar la sociedad de los siglos 19 e inicios del 20 desde la perspectiva actual para establecer una deuda histórica que, a mi juicio, no es tal. Este es el mismo argumento que esgrimen los indigenistas para decir que Europa está en deuda con los países hispanoamericanos.
Lo que sí veo en muchos hombres (no sólo jóvenes, sino también cincuentones) es un hartazgo. Día si, día también se nos pone la etiqueta de delincuentes a los hombres por el simple hecho de nacer hombres. Y no por activistas "feministas" sino por ministras y secretarias de estado, las cuales cobran entre 3 o 4 veces más que yo para llamarme violador y delincuente. Es hartazgo no nuevo machismo, lo que sucede es que si hablas en contra de estos planteamientos del ministerio de igualdad, eres un machista. No señor, el decir basta no te hace machista.
No puedo hablar por otras familias pero en la mía, tanto a mi mujer como a mi hija siempre las he apoyado en todo, ahora el problema está en como estamos dejando la sociedad para nuestros hijos varones, llevándolos a ser el nuevo sexo débil por los delirios políticos de unas cuantas activistas, que no feministas porque plantean una desigualdad hacia el sexo femenino.
Hola Antonio, lo primero gracias por tomarte el tiempo de leer y responder, siempre es bueno recibir comentarios y más si son razonados como el tuyo.
He cometido el error de generalizar sin aplicar un filtro a esas afirmaciones tan contundentes del post. Ya que, por supuesto, hoy en día no todo el mundo es machista ni frena el desarrollo y potencial de las mujeres. Por desgracia los que si lo hacen generan mucho ruido y llaman mucho la atención y quería destacar que queda mucho por hacer para concienciar a las nuevas generaciones.
Sigo pensando que en la historia ha habido una represión generalizada hacia la aportación de la mujer. Eso no es culpa de los que vivimos en el presente, pero es de justicia dejarlo patente. Se han perdido grandes obras porque las mujeres no tenían ni espacio, ni dinero, ni tiempo para crearlas. Es un hecho.
No buscaba politizar la conversación ni potenciar la criminalización de los hombres, si no destacar a las mujeres y reivindicar su papel en la historia, cosa bien distinta. Quizás en el proceso he pecado de injusto metiendo a todos en el mismo saco, cuando por supuesto hay muchos hombres (como tú o como yo) que no dejamos de apoyar a las mujeres. Esa debe ser la norma, no la excepción.
Hola Javier
Aunque en el planteamiento inicial (la igualdad entre hombres y mujeres) coincidimos, cometes en este post un par de errores de bulto.
El primero es asumir que las redes sociales son una muestra representativa de la sociedad, lo cual no es cierto, ya que supongamos que, en el ejemplo que has dado, tenemos 1000 energúmenos (esta cifra la he estimado de forma aleatoria, por lo que es absolutamente factible que sean muchos menos) entre unos 20 millones de varones españoles (no incluyo en estas cifras hispanoamericanos ni extranjeros que hablen español correctamente), lo cual nos da un porcentaje ínfimo.
El segundo error que cometes es analizar la sociedad de los siglos 19 e inicios del 20 desde la perspectiva actual para establecer una deuda histórica que, a mi juicio, no es tal. Este es el mismo argumento que esgrimen los indigenistas para decir que Europa está en deuda con los países hispanoamericanos.
Lo que sí veo en muchos hombres (no sólo jóvenes, sino también cincuentones) es un hartazgo. Día si, día también se nos pone la etiqueta de delincuentes a los hombres por el simple hecho de nacer hombres. Y no por activistas "feministas" sino por ministras y secretarias de estado, las cuales cobran entre 3 o 4 veces más que yo para llamarme violador y delincuente. Es hartazgo no nuevo machismo, lo que sucede es que si hablas en contra de estos planteamientos del ministerio de igualdad, eres un machista. No señor, el decir basta no te hace machista.
No puedo hablar por otras familias pero en la mía, tanto a mi mujer como a mi hija siempre las he apoyado en todo, ahora el problema está en como estamos dejando la sociedad para nuestros hijos varones, llevándolos a ser el nuevo sexo débil por los delirios políticos de unas cuantas activistas, que no feministas porque plantean una desigualdad hacia el sexo femenino.
Un saludo.
Antonio
Hola Antonio, lo primero gracias por tomarte el tiempo de leer y responder, siempre es bueno recibir comentarios y más si son razonados como el tuyo.
He cometido el error de generalizar sin aplicar un filtro a esas afirmaciones tan contundentes del post. Ya que, por supuesto, hoy en día no todo el mundo es machista ni frena el desarrollo y potencial de las mujeres. Por desgracia los que si lo hacen generan mucho ruido y llaman mucho la atención y quería destacar que queda mucho por hacer para concienciar a las nuevas generaciones.
Sigo pensando que en la historia ha habido una represión generalizada hacia la aportación de la mujer. Eso no es culpa de los que vivimos en el presente, pero es de justicia dejarlo patente. Se han perdido grandes obras porque las mujeres no tenían ni espacio, ni dinero, ni tiempo para crearlas. Es un hecho.
No buscaba politizar la conversación ni potenciar la criminalización de los hombres, si no destacar a las mujeres y reivindicar su papel en la historia, cosa bien distinta. Quizás en el proceso he pecado de injusto metiendo a todos en el mismo saco, cuando por supuesto hay muchos hombres (como tú o como yo) que no dejamos de apoyar a las mujeres. Esa debe ser la norma, no la excepción.
Un saludo y gracias por la crítica.
Hola Javier
Completamente de acuerdo con esta respuesta tuya.
Un saludo y sigue creando el contenido que creas.
Antonio