Reflexiones tras 6 meses de Newsletter.
Esta es la misiva numero 33 de la Newsletter “De analógico a Digital”. El 12 de enero de este 2023 empezaba una nueva andadura bajo el paraguas de Substack. Antes había estado en Revue (otra gran plataforma para Newsletters que Elon Musk decidió matar) y cuando cambié de aires opté también por dar un enfoque diferente a estos envíos semanales.
En estos 6 meses he tenido tiempo de preparar con calma algunas de estas cartas. Eligiendo con tranquilidad el tema que iba a tratar, elaborando incluso pequeños archivos de audio que adjuntaba en las primeras ediciones, y disfrutando del proceso creativo de lanzar una Newsletter artesanal, hecha con mimo y cariño.
Pero con el paso de los meses y la subida del volumen de trabajo cada vez me ha resultado mas complicado encajar la elaboración de la Newsletter en mi día a día. Hasta llegar al momento en el que me encontraba sin nada que publicar a falta de 24 horas para el fatídico sábado. Mala señal cuando un día festivo se convierte en un problema…
Lecturas positivas a los problemas.
Yo no soy de los que dejan algo a medias. Salvo causa de fuerza mayor, y aquí la lista incluye solo desastres naturales, accidentes de gravedad o enfermedades complicadas. Salvo este tipo de situaciones, yo acabo todo lo que empiezo, forma parte de mi filosofía de vida.
Esto me auto obliga a cumplir con cualquier compromiso que haya adquirido, bien sea con mi audiencia en los podcast, con mis superiores en el trabajo o con amigos y familiares a los que tenga que ayudar en algo. Esta Newsletter se convirtió desde el primer día en una obligación personal para con quienes la recibís en cualquiera de sus variantes (email o vía App en el móvil). Por lo que siempre he sentido la necesidad de acudir a la cita de los sábados por la mañana, para que recibierais un correo a mi nombre.
Lo bueno de emprender y acabar un proyecto personal sin fallar en el camino es la satisfacción de que se ha cumplido con el deber. Mas allá de la calidad que hayan tenido las Newsletters, aunque unas hayan destacado sobre otras. Todas han contribuido a una misma función, la de dar continuidad a la comunicación.
Prefiero ver la lectura positiva que me aportan los problemas, antes que centrarme en las dificultades que hay que solventar para superarlos. Esto considero que es aplicable a muchos otros aspectos de la vida.
Echar la persiana y coger perspectiva.
Ahora toca descansar, parar de enviar correos y notificaciones cada sábado, dejar la mente en blanco un tiempo para sacar nuevas conclusiones. Uno nunca deja de analizar su entorno para intentar entenderlo, es la mejor forma de aprender a moverte en los tiempos que corren. Pero eso no significa que tenga que plasmar mis pensamientos en una Newsletter semanal. A veces es bueno pararse y descansar, sobre todo cuando puedes cerrar un ciclo estacional, y esta Newsletter cumple esa premisa.
Con la llegada del verano hace falta mas tiempo libre para disfrutar de la vida analógica; sin pantallas, sin conexiones, sin electricidad. Voy a aprovechar este descanso para coger algo de perspectiva y replantearme la forma y periodicidad de esta Newsletter. Lo mas probable es que vuelva a partir de septiembre, pero quizás de forma quincenal o mensual, aun no lo he decidido. Lo que tengo claro es que cuando vuelva avisaré de los cambios y del planning estipulado para la Newsletter.
He sacado varias conclusiones tras estos meses escribiendo y compartiendo mis ideas sobre tecnología y sociedad. Aunque desde fuera se puede ver como algo sencillo de acometer, no lo es tanto como parece. Concretar ideas, evitar repetir lo que dicen otros o agrupar conceptos que hagan reflexionar, resulta mas complicado cuantas mas semanas pasan, motivo por el que también es bueno parar.
Confío en que estos meses sin escribir me ayuden a coger fuerzas e inspiración para lanzar nuevas entregas que aporten algo valioso a quienes las reciben. En cualquier caso, muchas gracias a todos los que habéis recibido y abierto esta carta. Aprovechad el verano para desconectar lo que podáis, falta nos va a hacer en un mundo tan hiper conectado.
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